los ángeles en tu sonrisa

la magia,
la ternura de la pequeñez,
la maravilla de verte así:
en medio de santiago,
paseando por la peatonal,
desayunando en el mercado,
leyendo diarios;
mientras arden mil fuegos,
cuando otros anhelan
entredormidos, un nuevo cielo,
un poco más de pasión,
para moverse por tu corazón,
mil mapas,
el suspiro,
vino degustado.

De esos ruidos que recuerdas cuando sueñas

Algo nace de tu voz:
unos ángeles,
pequeños monstruos,
dicen mi nombre y el tuyo.
Algo nace,
no sé si es un río,
una luna mas nueva,
las piedras vueltas en belleza.
Algo nos apaga la voz,
cierra la puerta,
el recuerdo del último temblor.

Ventanas, puertas, pero nunca vos

Una sombra,
un antídoto contra la ansiedad.
Respiro,
y telarañas me rodean,
las negras aves,
las mudas voces de los otros,
de las estatuas,
que imitan tus poses,
del roce del viento y las hojas;
Nunca escritas,
ni descriptas,
las montañas,
las rosas,
las puertas.
las veredas de tu casa:
pequeños dibujos,
rastros de vos...

horizonte 2

Lejos,
cerca de ésta ciudad que buscas,
indagas,
la dirección del viento,
el sentido de las pequeñas cosas:
el rocío,
un lento amanecer,
temblor en la piel.
Y lo demás...
es puro vacío,
escenas donde nos encontramos,
pájaros,
árboles,
nubes con formas infinitas,
las lunas,
las líneas que dibujas al pasar.

horizonte

el poema

del mundo

escribe

el color

el silencio

claras

mudas palabras:

tejen una red

al río lanzada

la esperanza toda

en tu mirada

en la sonrisa

en la espera

en un cigarrillo

a cualquier hora

miras esa luna

la estrella más próxima

es tu bandera

tierna quimera

permanente primavera

con vos dibuja.

suspiro

repito el nombre
la breve palabra
contiene el universo
uno de tus abrazos
el beso
moneda que intercambiamos
flujo
energías
belleza
donde estas vos
donde se expande
viajamos
en vías del infinito
somos...

11:20

¿vendrás?
en la mañana habrá un destello,
un signo,
tu piel derrama:
las preguntas,
las tramas,
los caminos,
el devenir...

¿qué mas?
¿qué nos quedará al despertar?